domingo, 12 de abril de 2009

DESPUES DE LA TORMENTA

Siempre sale el arco iris, que es la trasformación de las gotas de agua al ser traspasadas por los rayos del sol. Pero quisiera ver en él, en la combinación de sus colores, en su semicírculo perfecto, maravilloso y tranquilizador, la unión de punta a punta de la tierra por esos colores de todos que nos representan a los habitantes del “Planeta Maldito” ese en el que sus gentes se matan por ser distinto en algo.
Una de las cuestiones que más nos separa es el tema religioso- ateo, sea del color que sean, como valor sagrado de humanidad y caridad o justicia social, y los intereses de naciones o bloques de presión geo- políticos, que cuando la tormenta ruge se desvanecen los colores y se destruyen unos a otros.
Hay que ser obtuso y desconsiderado y desprovisto de todo sentido del respeto por los demás, para tratar de ridiculizar al Dios de una gran parte del mundo como el musulmán, Hay que tener poco conocimiento a nivel religioso-cultural y de la idiosincrasia de unos pueblos que ya han demostrado a través de la historia que son capaces de inmolarse en la guerra santa que sus santones y dirigentes político-religiosos son capaces de lanzarlos y desconsiderado y desprovisto de toda lógica para vengarse de las afrentas a sus pueblos.
Hay que ser obtuso en grado sumo para creer ser los gendarmes del mundo por mucho dinero y poder bélico que se tenga. Hay que ser sumamente insolidario para matar por el dominio de determinados países, que Alá les ha conseguido después de varios avatares de riquezas y pobrezas, el dominio del petróleo, presumiendo de ser el país de la democracia, sin mirar para atrás y ver que todo imperio para serlo durante toda la historia, aniquiló, ultrajó, esclavizó a los demás pueblos para su beneficio y “ grandeza”.
Todos los imperio hicieron lo mismo; El egipcio, mesopotámico, pérsico, griego, romano, bárbaro, árabe, español, ingles, francés, alemán, soviético, americano y algunos más.
¿ No es suficiente ejemplo, no es referencia suficiente para gentes civilizada ?
Pues con todo y con eso, hay quien juega con las vidas por creerse superiores, por querer controlar a los demás.
Millones de muertos inocentes riegan las superficies del “Planeta Maldito” para los débiles ese que se llama Tierra.
La verdad es que el pueblo cae frecuentemente en la idolatría y en las razones teológicas, pero no es menos verdad que otros solo creen en la justicia social, y cerebros calenturientos y ávidos de poder económicos y políticos-militar resplandecen a costa de los demás con propósitos que todos sabemos.
Existe un organismo mundial al que hay que darle los poderes y medios suficientes para frenar la barbarie y velar por la paz mundial, para que las generaciones venideras no tengan que avergonzarse de la maldad y ceguera de sus antecesores.
Si los políticos son capaces de movilizar grandes masas por algún motivo que creen injusto y cuando toman el poder lo repiten, será que solo se movilizan para desgastar al gobierno de turno y nada más. Es que no son capaces de unirse y que podamos manifestar a nivel universal nuestra repugnancia por lo que sucede de injusto en el mundo.
En la O.N.U, saben muy bien que cientos de países están en guerra fraticida
Que el hambre reina con toda su carga de injusticia social, situaciones que algunos medios y organizaciones denuncian.
Ante las calamidades extremas en las que se ven los niños que quieren comer tienen que hacerse soldados y aprender a matar, que los ancianos mueren de distintas calamidades y que las mujeres sufren violaciones y ultrajes de todo genero para poder sacar adelante a sus bebes, ¿ No son ellas verdaderas heroínas ¿ Y el mundo y todas sus organizaciones políticas o religiosas cuando a la hora de las noticias los medios televisivos nos muestran esas miserias, miran para sus mesas repletas de todo y comen tranquilamente y las sobras a la basura que es donde nos merecemos estar todos.
Creo que el orgullo, la indiferencia y la ambición nos hace indignos de pertenecer a la humanidad, pues es injusto mirar para otro lado.
Ahora tenemos otros problemas de grandes dimensiones.
Hace treinta años escribí un articulo avisando del resurgir de la raza amarilla. Pero son razas milenarias y su resurgir por mejorar las condiciones de vida, occidente los ve como un peligro latente en lo político y económico , pero tienen derecho a incorporarse a una vida mejor
En la actualidad, tenemos un problema mucho más cercano y sangrante, España como la frontera de europea con el Continente africano, tiene que
soportar la invasión de jóvenes provenientes de varios países; esto es el resurgir de África fuera de ella en otro continente, que tienen que emigrar
por una vida mejor, gracias que España los recibe dándoles un trato de humanidad pero que es incompleto.
Para África es tremendo, pues los que vemos en T.V. pasando toda clase de calamidades, no nos equivoquemos , para atravesar países y llegar a las playas donde venden las plazas en los cayucos necesita juventud, buena condición física y dinero para todos los gastos, luego no son los pobres que nos presentan .
Ya un jefe de gobierno de uno de los países afectados se quejaba de que todos los universitarios del país estaban emigrando y se estaban quedando sin juventud preparada para poder dirigir la nación.
La solución del problema la sabemos todos, ayuda de infraestructuras y asesorarlos en lo económico con aportaciones generosa in-situ,
Pudimos ver un drama cuando Malta no quería recibir a
unos emigrantes recogidos por un pesquero español, los mantuvieron fuera de puerto mientras se negociaba. Pero esa insolidaridad tuvo un resultado feliz y lógico, el reparto de ellos entre las demás naciones.
¿ No seria esa la solución para España? Somos la frontera sur de Europa y
esta se limita a enviar ayudas insuficientes para la magnitud del problema que se nos esta presentando,
Si todos se quedan en nuestro país ¿ Qué sucederá en un futuro lejano en lo político, étnico y religioso ¿ Hay que planificar con ideas inteligentes que miren al futuro lejano



Luciniano Rodríguez Santamaría. Profesor de E.F.

No hay comentarios:

Publicar un comentario